19 de Abril de 2024
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Presupuesto 2018 (II)

24 Sep 2017 /

Sin lugar a dudas, el Paquete Económico que el Ejecutivo Federal puso a consideración del Congreso de la Unión de México, que está por discutirse por los legisladores mexicanos, tendrá que ser modificado como consecuencia de los sismos que han aquejado a México en el mes de septiembre de este año. Ello en virtud de que se habla de un costo de reconstrucción equivalente a dos mil millones de dólares o cerca de cuarenta mil millones de pesos. Como quiera que sea, lo más lamentable es el número de víctimas fatales y heridos, que han causado estos sismos en este mes. Las pérdidas materiales, aunque se pueden recuperar son cuantiosas, no así las personas que perdieron todo incluso la vida.

Existen muchas maneras de poder paliar financieramente una situación como la que enfrentamos los mexicanos. Una de ellas es apretándonos más el cinturón y haciendo ajustes en el Presupuesto de 2018, que no se habían contemplado hasta hoy, eliminando gastos, prestaciones innecesarias de funcionarios, como seguros de gastos médicos mayores, viajes al extranjero, incrementos de nóminas o programas de gobierno innecesarios, etc. Otra forma de obtener recursos adicionales, es aumentándole cinco centavos a la gasolina en forma temporal, digamos un año para contribuir con nuestro esfuerzo colectivo al pago de las pérdidas en sus bienes, a los mexicanos en desgracia. La propuesta de los partidos políticos de canalizar al 100%, los presupuestos aprobados para sus gastos de campaña, es bienvenida.

El expediente tradicional de recurrir a los fondos internacionales a largo plazo, permite sin duda contar con efectivo casi de inmediato para un programa de reconstrucción de las zonas desvastadas, que puede ser reintegrado a veinte años, o una mezcla de ingresos provenientes de diversas fuentes, son de seguro diferentes maneras de allegarnos recursos provenientes de origen distinto.

Tal vez lo más relevante, es que se puedan crear mecanismos de gran importancia que le permitan a los mexicanos, visualizar y fiscalizar con transparencia, el origen y destino de los recursos aplicados a los diversos propósitos para una reconstrucción que merezca el respeto de todos nosotros los mexicanos. Se debiera de crear un fideicomiso de origen destino de los recursos aplicados a la reconstrucción, fiscalizables por la sociedad civil en todo momento, con la debida transparencia y rendición de cuentas, en tiempo real y apareciendo en Internet en todo momento. De esta manera, los mexicanos pueden estar seguros de que sus recursos han sido bien aplicados.


Comentarios: [email protected] (*) Maestro en Ciencias y Doctor en Economía por la London School of Economics and Political Science, de la Universidad de Brunel y la Universidad de Londres, Inglaterra.

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