El Futuro de los puertos de mexicanos

29 Oct 2017 /

Durante el último trimestre de 2016, las exportaciones agrícolas y de alimentos a Japón crecieron 5.99%, mientras que las exportaciones mexicanas hacia el continente asiático se incrementaron 36.8 %, tan solo en el mes de noviembre del año pasado, lo que indica que el indicador de las exportaciones mexicanas tuvo su mayor dinamismo hacia ese continente, donde el crecimiento inusitado de las exportaciones hacia el Lejano Oriente, tiene mucho que ver con los amagos del Presidente de los Estados Unidos de América Donald J. Trump, de finalizar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), con México y Canadá.

Por ello, más allá de establecer que es una política equivocada económicamente hablando, de parte de esa persona hacia México y en general hacia el mundo, que le habrá de traer futuros problemas económicos y políticos a su país, lo más importante es por una parte seguir con mayor productividad y competitividad, penetrando el mercado de manufacturas de Estados Unidos, que no importa que se insista en terminar con el TLCAN, las mayorías de la relaciones comerciales bilaterales con el vecino del norte, habrán de continuar por muchas décadas con o sin Tratado, como lo muestra ya la manera como hemos incursionado en cuestión de meses hacia los mercados de Asia. Para ello, la modernización del Sistema Marítimo y Portuario de México, como ya está ocurriendo, es imprescindible.

Para los efectos de este artículo, lo relevante a destacar es que hemos cometido el error histórico en penetrar comercialmente solo el país del norte, lo que nos ha impedido preocuparnos por abrir otros mercados en el mundo europeo, latinoamericano, africano, del Medio Oriente y del continente oceánico, más los países del ex bloque soviético y por supuesto China, que son oportunidades que no debemos desaprovechar, pero que representan las grandes opciones del mundo de hoy para los mexicanos. No podemos cometer este error histórico otra vez, por lo que hay que hacerlo cuanto antes. Tenemos y debemos lanzarnos a la conquista del mundo, con la indudable ventaja de seguirle vendiendo cada día más a nuestros vecinos del norte.

Dentro de este mundo de posibilidades, estamos ante una oportunidad histórica de aprovechar ahora sí, el potencial marítimo y portuario, que hemos pasado por alto, producto de una ignorancia supina, que asemejan a las políticas que hubo que habilitar en la modalidad de reformas estructurales, lo que nos abre a nuestro país una de las mayores oportunidades de nuestra historia contemporánea, en materia energética, petrolera y eléctrica, pero también en materia de telecomunicaciones. Tan solo en el sector petrolero, se esperan en los próximos años inversiones que antes de que termine este sexenio, será del orden de los cien mil millones de dólares, la mayor en la historia de este sector.

Veracruz, Tamaulipas y Tabasco están ante una oportunidad de oro, para
desarrollar junto con los demás puertos del Golfo de México y el Caribe, de retomar el Plan Puebla Panamá (PPP), impulsando y promoviendo las inversiones petroleras de nueva cuenta y respetando el medio ambiente y no contaminando nunca más la riqueza de las aguas del Golfo. Pero el desarrollo regional en base al impulso marítimo y portuario, es esencial para logarlo.


Comentarios: [email protected] (*) Maestro en Ciencias y Doctor en Economía por la London School of Economics and Political Science, de la Universidad de Brunel y la Universidad de Londres, Inglaterra.