EL FUTURO DE LOS PUERTOS MEXICANOS (II)

06 Nov 2017 / *Apenas se vislumbra y se comienzan a valorar los enormes beneficios y oportunidades que representa para la población de México

El futuro de los mares y costas de México, estará íntimamente ligado a los puertos distribuidos a lo largo de los litorales de México, que a su vez habrá de depender del grado de desarrollo que se vaya logrando con las poblaciones asentadas en los puertos marítimos y sus alrededores, que normalmente son zonas de naturaleza urbana; asimismo, la inmensa riqueza de los mares colindantes con el territorio mexicano, les aseguran la sustentabilidad de su desarrollo económico, tanto a los municipios costeros como a las poblaciones de las entidades federativas costeras. Sin embargo, también habrá que enfrentar las adversidades de varias de las entidades federativas que últimamente están siendo golpeadas por los fenómenos climatológicos y que en los últimos años parecen multiplicarse, sin visos de aminorar.
De esta manera, apenas se vislumbra y se comienzan a valorar los enormes beneficios y oportunidades que representa para la población de México, lo que todos sabemos y que se refleja en la inmensa riqueza de los recursos materiales marinos y en general, la tan diversa flora y fauna que albergan los mares y costas mexicanos. Por otra parte, no se pueden minimizar los ingresos que reportan al país la agricultura, la pesca, las industrias turística, minera, metalúrgica, naval, petrolera y eléctrica, en casi todas las entidades costeras, más los ingresos provenientes de las divisas que generan sus migrantes, más las que aportan los servicios provenientes del comercio nacional e internacional, por lo que tendrán que coordinarse todavía mejor, para el beneficio de todas estas entidades.
Por otra parte, las actividades costeras están relacionadas también y de manera directa e indirecta con los servicios portuarios integrales, que son parte de los activos con los que cuenta una economía tan abierta y diversa como la mexicana. Lo importante a destacar, es que el potencial urbano y regional no se ha aprovechado como se debiera, ya que México cuenta con estándares de exportación en la industria manufacturera, que son de primer mundo y que ha permanecido rezagado por las entidades federativas costeras, por lo que hay que reencauzar este gran caudal de oportunidades, ya que representan un filón de oro para México, pero que inexplicablemente sigue ignorándose.
De esta manera, cuando hablamos de los puertos mexicanos, tenemos que hablar de sus economías regionales y urbanas, de sus servicios portuarios integrales, de las riquezas naturales como el gran yacimiento petrolífero, el más grande de los últimos quince años recientemente descubierto cerca de Cosamaloapan, Veracruz; por ello, no podemos soslayar, la importancia de la riquezas de nuestros mares y de los estados costeros de México, sin dejar de considerar nuestra marina mercante y la flota pesquera, la industria marina militar y la industria de la información náutica, que con la industria de la vigilancia de nuestras costas, representan enormes oportunidades para las entidades federativas costeras,
Por último, resulta inverosímil la dicotomía existente, entre los niveles de pobreza que se observan en la población y, las diversas riquezas naturales del territorio costero mexicano. En todo este entorno, subyace la idea que se debe seguir tomando el toro por los cuernos y que se promuevan masivamente, los mecanismos de inversión y empleos que le generen la riqueza al pueblo de México, que necesita. No todo es corrupción, si no también mal manejo de las economías locales y regionales.


Comentarios: [email protected] (*) Maestro en Ciencias y Doctor en Economía por la London School of Economics and Political Science, de la Universidad de Brunel y la Universidad de Londres, Inglaterra.