O lo hacen ustedes o lo hacemos nosotros

*No vamos a permitir que toda esta anarquía siga ocurriendo

Agencias . | Washington, DC, Estados Unidos | 01 Ago 2023

México ha sido uno de los aliados más cercanos de Estados Unidos durante años, tanto durante administraciones demócratas como republicanas, incluso durante la de Donald Trump.

Eso puede estar cambiando. Funcionarios y votantes republicanos no sólo han expresado críticas a México, sino también hostilidad abierta contra el vecino del sur de Estados Unidos.

El ejemplo más crudo son los repetidos llamamientos de los candidatos presidenciales republicanos a bombardear México o a enviar tropas allí unilateralmente para detener el tráfico ilegal de drogas, lo que sería un acto de guerra.

Trump abrió el camino: preguntó a funcionarios de defensa sobre atacar a México con misiles mientras era presidente, y durante la campaña presidencial de 2024 ha apoyado la acción militar. Ron DeSantis ha pedido el uso de la fuerza letal y un bloqueo naval de los puertos mexicanos para detener a los narcotraficantes. Candidatos más moderados, como Tim Scott y Nikki Haley, también han respaldado el uso del ejército contra los cárteles de la droga en México.

"¿Sabe lo que se le dice al presidente mexicano? 'O lo hace usted o lo hacemos nosotros'", dijo Haley en marzo. "Pero no vamos a permitir que toda esta anarquía siga ocurriendo".

Estos llamamientos no se han convertido en un foco importante de atención nacional porque la campaña republicana sigue en sus primeras etapas. Pero a medida que la campaña se acelere -incluso en el primer debate, el 23 de agosto- es probable que se oiga hablar más de este tema.

Tomando ejemplo del libro de estrategias de la campaña y de la presidencia de Trump en 2016, otros republicanos ya han expresado su menosprecio de los mexicanos y otros latinos en políticas, en particular sobre inmigración. En Texas, el gobernador Greg Abbott puso alambre de púas, barreras flotantes y policías estatales a lo largo de la frontera entre Estados Unidos y México para disuadir a la gente de entrar ilegalmente en el país. El gobierno federal demandó a Texas la semana pasada para intentar detenerlo.

¿Qué está ocurriendo? La postura representa un auténtico cambio dentro de la política republicana. Durante la mayor parte de las últimas décadas, los republicanos han respaldado unos lazos más estrechos con México. (El tratado de libre comercio de los años 90, el TLCAN, tuvo apoyo bipartidista.) Y en los primeros días de la presidencia de Trump, la mayoría de los votantes republicanos dijeron en las encuestas que México era un aliado de EE.UU. Ahora, los votantes republicanos están divididos a partes iguales sobre si México es un aliado o un enemigo:

Enfoque extremo
Los republicanos suelen presentar la idea de militarizar por completo la guerra contra las drogas como una evolución de la política: tratar a los cárteles mexicanos como al ISIS u otros grupos terroristas. Pero desplegar unilateralmente el ejército en México supondría una escalada significativa de la política estadounidense.

Hablé con media docena de expertos en política antidroga y antiterrorista de todo el espectro político. Todos ellos criticaron el enfoque como extremo, ineficaz y autodestructivo. "En 35 años, esto se lleva el premio a la idea más estúpida que he oído nunca", dijo Jonathan Caulkins, de la Universidad Carnegie Mellon.

Además del probable peaje humanitario y del golpe a la posición de EE.UU. en el mundo, cualquier incursión en México podría empeorar los mismos problemas que los republicanos están tratando de abordar. En la medida en que Estados Unidos ha logrado frenar la inmigración ilegal y las drogas en los últimos años, ha contado con la estrecha cooperación de México. Tanto Trump como el presidente Biden han colaborado con funcionarios mexicanos para impedir que los sudamericanos y centroamericanos viajen a EE.UU. a través de México.

Es casi seguro que México dejaría de colaborar si Estados Unidos enviara tropas o dejara volar misiles. El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, ha dicho que hablar de enviar al ejército estadounidense al sur de la frontera es "irresponsable" y "una ofensa al pueblo de México, una falta de respeto a nuestra soberanía."

Los representantes de las campañas de Trump, DeSantis y Haley no respondieron a las preguntas sobre el uso del ejército contra los cárteles mexicanos. Una portavoz de Scott reafirmó su apoyo a la idea, pero no respondió a preguntas sobre si pediría la aprobación de México antes de desplegar a los militares allí.

Charla política
Parte del lenguaje puede achacarse a las primarias presidenciales, cuando los políticos tienden a adoptar posturas más extremas en todo tipo de cuestiones antes de moderarse en las elecciones generales. Eso podría estar ocurriendo aquí.

Los políticos también están desesperados por parecer que están haciendo algo respecto a la inmigración ilegal y la crisis de las sobredosis de drogas, a menudo con promesas engañosas de soluciones rápidas y acciones decisivas. Pero las soluciones duraderas a estos problemas han eludido a Estados Unidos durante años.