El voto libre y secreto, faro de esperanza: Élfego Bautista

*Sin foto al voto, para una verdadera democracia *Los desafíos de la democracia en México *Ahora, las definiciones se han transformado ya que con base a las plataformas de la Inteligencia Artificial, se advierte que la política de México existe una jocosa presunción: “¡Ya podemos votar libremente por el PRI, PAN o PRD”, porque “todos los corruptos que había en esos partidos, ya se fueron a MORENA”

Blas A. Buendía . | Ciudad de México | 08 May 2024

En su espacio Así es el Derecho, el magistrado civilista Élfego Bautista Pardo, exaltó la importancia del proceso electoral que México está viviendo en estos momentos, ya que el 2 de junio el pueblo definirá los destinos del país, si se encamina por el rescate de la República o preferirá mantener el fenómeno de la cleptocracia, que es un régimen basado en acciones riesgosas, que en lugar de ofrecer un tácito desarrollo, se ha desorientado por elecciones de Estado, supuestamente “controladas” por el narcotráfico.

En el entramado de la democracia mexicana —precisó— el derecho al voto libre y secreto consagrado en el artículo 41 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, es uno de los pilares fundamentales, pues garantiza a todos los ciudadanos poder ejercerlo de manera autónoma y sin presiones externas, así como a mantener en secreto su elección.

“El voto libre y secreto se erige como herramienta indispensable para la consolidación de sistema democrático sólido y representativo y con él se busca asegurar que cada individuo pueda expresar su voluntad sin coacciones ni influencias indebidas, y resguardada de cualquier forma de intimidación o manipulación”, indicó el magistrado Élfego Bautista, titular de la Tercera Ponencia de la Quinta Sala Civil del Poder Judicial de la Ciudad de México que preside el magistrado penalista Rafael Guerra Álvarez.

En el contexto mexicano —explicó— este principio cobra especial relevancia porque es fruto de la larga lucha histórica por la democratización de la nación y la defensa de los derechos ciudadanos. Desde la instauración del sistema democrático, el voto libre y secreto ha sido imprescindible para la construcción de una sociedad más justa y participativa.

Abundó: “A pesar del avance en materia democrática, persisten desafíos a la garantía plena de este principio. La presión social, la compra de votos, la coacción de grupos de interés, el fotografiar la boleta electoral como vía de comprobación del voto a favor de un partido en específico a cambio de una retribución económica y la violencia política se hallan entre lo que puede vulnerar la libertad y la secrecía del sufragio.

“Es responsabilidad del Estado y de las instituciones electorales velar por la protección y el respeto irrestricto al voto libre y secreto. Para ello resulta esencial fortalecer los mecanismos de vigilancia, prevención y/o sanción a prácticas contra este principio, así como promover la adquisición de la cultura cívica precisa para que la ciudadanía valore y resguarde esa forma de su libertad de expresión política”, dijo.

En este sentido, el magistrado Élfego Bautista ponderó el gran aparato electora que ha construido los avances democráticos de la Nación, como es la capacitación de los funcionarios de casilla, la implementación de medidas de seguridad en los procesos electorales (tales como la dirigida a evitar que se tome foto al voto) y promover la participación activa de la ciudadanía en la vigilancia del proceso, son acciones clave para garantizar la integridad del sufragio.

“En estos tiempos de democracia y transformación social y política, el voto libre y secreto se erige como faro de esperanza y recordatorio constante de los ideales de libertad y justicia que sustentan nuestra convivencia como sociedad. Proteger y fortalecer este principio es ineludible en la construcción de un México más justo y equitativo para todos sus habitantes”, enfatizó.

Y concluye: “El voto libre y secreto no sólo es un derecho, sino también deber cívico y moral que nos convoca a ejercer nuestra ciudadanía de manera responsable y consciente, en aras de construir un futuro común basado en la pluralidad, la inclusión y el respeto mutuo”.

Pertinente señalar que el alma mater del artículo 41 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos define a los partidos políticos como entidades de interés público y que tienen el propósito de promover la participación del pueblo en la vida democrática.

Además, se les garantiza el financiamiento público para el sostenimiento de sus actividades ordinarias permanentes. El articulado también establece que, en caso de falta absoluta del consejero Presidente o de cualquiera de los consejeros electorales durante los primeros seis años de su encargo, se elegirá un sustituto para concluir el período de la vacante.

Durante las campañas electorales, se debe suspender la difusión en los medios de comunicación social de toda propaganda gubernamental, situación que para el actual régimen, se le hace fácil cometer infracciones un día sí, y otro también, para promover la imagen de sus aspirantes a puestos de elección popular.

Lamentablemente, no todo es color de rosas ya que México tuvo una regresión de más de tres cuartos de siglo cuando las elecciones se desarrollaban a punta de pistolas, construyéndose una Dictadura Perfecta que tuvo en sus manos por más de siete décadas el Partido Revolucionario Institucional.

Si bien el PRI gobernó México por 71 años, desde su fundación en 1929 como Partido Nacional Revolucionario (PNR) y hasta el año 2000, ya como Partido Revolucionario Institucional (PRI), emanando 14 presidentes constitucionales.

Ahora, las definiciones se han transformado ya que con base a las plataformas de la Inteligencia Artificial, se advierte que la política de México existe una jocosa presunción: “¡Ya podemos votar libremente por el PRI, PAN o PRD”, porque “todos los corruptos que había en esos partidos, ya se fueron a MORENA”.

De tal suerte que el Proceso Electoral 2023 -2024 será reconocido como el más grande que ha tenido México. Se celebrarán elecciones federales y la concurrencia de las 32 entidades federativas, es decir, estarán en juego la Presidencia de la República, 128 cargos para la renovación del Senado de la República, así como de 500 curules en el faraónico Palacio Legislativo de San Lázaro.

Reportero Free Lance *

Premio México de Periodismo Ricardo Flores Magón-2021

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