24 de Febrero de 2025
Internacional

Denuncia Dalai Lama "régimen de terror" chino en el Tibet

Las autoridades chinas acusaron al Dalai Lama de organizar las protestas y juraron que reaccionarán con firmeza para mantener el orden en Lhasa

Agencias . | Pekín, China | 16 Mar 2008

Las protestas de tibetanos se propagaron este domingo en China, con reportes de siete manifestantes muertos en Sichuan (sudoeste) tras una represión que ya dejó decenas de muertos en Lhasa y llevó al Dalai Lama a denunciar el régimen de terror impuesto por Pekín.

Lhasa, la capital de la Región Autónoma de Tíbet, seguía este domingo cerrada a los turistas y cercada por las fuerzas de seguridad, tras las manifestaciones del viernes que según el gobierno tibetano en el exilio dejaron 80 muertos, muchos más que las diez víctimas señaladas por las autoridades de Pekín.

En la vecina provincia de Sichuan, la policía mató a tiros este domingo a por lo menos siete personas que participaban en una marcha que había salido de un monasterio budista del distrito tibetano de Ngawa, de acuerdo con la organización Campaña Internacional por Tíbet.

Otro grupo identificado con la causa tibetana -el Centro Tibetano por los Derechos Humanos y la Democracia- elevó a trece el número de víctimas mortales en Ngawa.

Según otras noticias, el sábado también hubo protestas en el monasterio de Labrang, en la provincia de Gansu (noroeste).

Desde su exilio en Dharamshala (norte de India), el Dalai lama, líder espiritual de los budistas tibetanos, denunció la represión desencadenada por las autoridades comunistas chinas y pidió una investigación internacional sobre lo ocurrido en Lhasa.

Las autoridades chinas se apoyan únicamente en la fuerza para lograr un simulacro de paz, una paz conseguida por la fuerza usando para ello un régimen de terror, declaró el Premio Nobel de la Paz en una rueda de prensa.

Las autoridades chinas acusaron al Dalai Lama de organizar las protestas y juraron que reaccionarán con firmeza para mantener el orden en Lhasa.

Los hechos muestran que las fuerzas separatistas y reaccionarias del interior y exterior (de Tíbet) se orquestraron minuciosamente con el objetivo de la independencia, indicó el oficialista Diario del Tíbet.

La organización de defensa de los derechos humanos Amnistía Internacional instó al gobierno chino a autorizar una investigación independiente de Naciones Unidas, mientras Estados Unidos y la Unión Europea expresaron su inquietud por la situación y llamaron a China a actuar con moderación.

La ola de violencia provocó una multiplicación de llamamientos al boicot de los Juegos Olímpicos de Pekín, que se inaugurarán en agosto.

Pero el Dalai Lama consideró que los Juegos deben celebrarse.

Quiero esos Juegos. Los chinos necesitan sentirse orgullosos por ello. China se merece ser anfitrión de los Juegos Olímpicos, afirmó.

En Dharamshala, un millar de tibetanos exiliados denunció hoy el genocidio en Tíbet y pisotearon banderas chinas.

El alcalde de Lhasa, Doje Cezhug, aseguró que la situación en Tíbet es en conjunto buena y las autoridades emplazaron a los manifestantes a rendirse antes del lunes a medianoche, prometiéndoles clemencia.

Los turistas extranjeros que llegaron el domingo a Chengdu (capital de Sichuan) reportaron que el sábado oyeron numerosos disparos en Lhasa.