26 de Abril de 2024
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EL EFECTO DE LAS REMESAS

02 Jul 2017 / *Las remesas de los migrantes son un ejemplo objetivo de lo que se puede obtener a partir del ingreso que les genera un trabajo, producto de su esfuerzo normalmente físico y mental, pero que permite a los mexicanos recibir recursos líquidos que incrementan el nivel de consumo de sus familias, lo que contribuye a su bienestar y eleva sus niveles de vida

Los últimos datos del Banco del Ahorro Nacional y Servicios (Bansefi), nos dicen que de enero a mayo de este año, las remesas que los migrantes mexicanos enviaron en su mayor parte de los Estados Unidos de América a México, se incrementaron en un 21 por ciento, al sumar 10 mil 900 millones de dólares, lo que significa que los montos que se presupuestan anualmente para desarrollo social en México, son menores a los que reciben las familias más pobres en todo el país; sin embargo, el efecto económico en términos cuantitativos, también es mucho mayor a los recursos dedicados en un año a los programas sociales, porque tan solo con las remesas de este semestre, las partidas para el desarrollo social deducidos los gastos corriente y de capital dedicados al rubro social, son mucho menores.

De esta manera podemos comentar lo que sin lugar a dudas es evidente, que los recursos de las remesas de los migrantes son recursos de trabajadores mexicanos, que con su esfuerzo benefician directamente a las familias a las que son enviadas, mientras que los recursos asignados a programas sociales son recursos transferidos vía asignación presupuestal, con propósitos de beneficio a poblaciones en situación de pobreza, con partidas y asignaciones exprofeso, pero que también provienen inicialmente de la parte productiva de México, pagados vía los impuestos de los mexicanos. Por este motivo, sería muy conveniente que se pudiesen adoptar proyectos productivos que en lugar de que resulten en subsidios, pudiesen servir para incrementar los ingresos de la población que actualmente recibe estos subsidios, pero con fuentes productivas.

Lo indicado es que en términos económicos una asignación presupuestal tenga un destino de carácter productivo, que sea exclusivamente un gasto para el consumo del receptor del susidio. Por este motivo, las asignaciones presupuestales vía subsidios, deben ser exclusivamente para ayudar a la población en desventaja, población discapacitada impedida para trabajar, hombres y mujeres mayores de edad, menores de edad o sin padres, etc.

En este sentido, las remesas de los migrantes son un ejemplo objetivo de lo que se puede obtener a partir del ingreso que les genera un trabajo, producto de su esfuerzo normalmente físico y mental, pero que permite a los mexicanos recibir recursos líquidos que incrementan el nivel de consumo de sus familias, lo que contribuye a su bienestar y eleva sus niveles de vida. Este esfuerzo es igual a exportar mano de obra barata, que por las diferencias en los niveles salariales entre un país y otro, siempre resultan benéficos para los mexicanos, porque sus ingresos en general serán mayores en Estados Unidos que en México, de aquí que una parte de lo que se pueda ahorrar de estos ingresos, se convertirá en un excedente y tal vez en una remesa.



Comentarios: [email protected] (*)Maestro en Ciencias y Doctor en Economía por la London School of Economics and Political Science, de la Universidad de Brunel y la Universidad de Londres, Inglaterra.

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