El nuevo Washington Post: sobrevivir y destacar más allá del flujo informativo

El Washington Post se prepara para la nueva era.

Coincide en su aproximación con la del New York Times.

La conclusión es una ruptura paradigmática con respecto a lo que siempre ha sido el periodismo.

Ambos apuntan a generar oferta de valor que no dependa del ciclo noticioso.

El New York Times lo ha hecho cada vez más evidente con sus adquisiciones a lo largo del tiempo.

The Athletic para atraer una base de suscriptores obsesionada con el deporte.

Wirecutter para recomendaciones y reseñas de productos.

Los juegos como ese hábito diario que llega a ser incluso más recurrente que el del consumo de información.

El NYT ha llevado esa transformación hasta en el modo en que se promueve.

Lo hizo, por ejemplo, cuando intervino el tren que va de Times Square a la Grand Central Station en Nueva York.

Ahí acuñó el “All In” para impulsar la idea de que existe un producto del NYT para cada momento de la vida.

Y lo volvió a hacer a comienzos de este mes con el rediseño de su aplicación.

En su anuncio oficial al respecto habló de satisfacer todas las necesidades de los usuarios a lo largo del día.

Desde que The Times anunció su estrategia de suscripción esencial hace dos años, hemos logrado avances significativos para satisfacer las noticias y las necesidades de vida más importantes de las personas todos los días. Nuestra nueva aplicación es el último ejemplo tangible de nuestra estrategia en acción.

El Washington Post, de acuerdo a u  informe publicado por el NYT, apunta en esa dirección.

Benjamin Mullin relata que hace unos días, en una actualización al staff sobre el estado del Washington Post, Karl Wells, chief growth officer del WaPo, anticipó una estrategia de adquisición de audiencias en áreas de cobertura con el potencial de atraer nuevos suscriptores.

Ahí, como en el caso del NYT, soltó una frase que habla de escapar del ciclo informativo.

De no depender de lo que ocurra a nivel noticioso para sostener y crecer su base de suscriptores. 

“Se trata de que pongamos nuestra casa en orden. Se trata de sentar las bases para que podamos crecer independientemente del ciclo de noticias”.

Los rumores apuntan a un interés por adquirir Punchbowl.

Un medio especializado en la cobertura de los congresistas en Estados Unidos.

Punchbowl es una de las startups de medios más prometedoras de dicho país al tener una valuación por arriba de los 100 millones de dólares.

Fue fundado hace tres años por ex periodistas de Politico.

Genera un revenue anual de 20 millones de dólares.

Encaja su creación con la era de los medios enfocados en un nicho más que en el generalismo.

El mismo Washington Post apunta en ese sentido con la creación de WP Intelligence, que busca atraer a profesionales de distintos sectores con contenido obsesivo sobre distintas industrias.

El modelo es semejante al que maneja Axios en su estrategia de suscripciones.

La dinámica en los medios se revierte.

Está pasando de una dependencia en el ciclo noticioso con el resto de actividades como complemento a llevar a esas actividades complementarias al rol protagónico mientras que al ciclo informativo se le delega.

La era de Donald Trump como presidente de Estados Unidos representó un dulce momento para los medios en cuestión de tráfico y suscriptores.

Pero una vez que se fue, incluso ahora que podría estar de regreso, a los medios les quedó claro que ese boom de suscriptores podía resultar arriesgado sin productos que retuvieran a esa audiencia.

Lo que está por verse es si el Washington Post está a nivel del New York Times para comenzar a expandirse cuando su producto central no goza ni del reconocimiento ni del impacto que se requiere.

El Times fortaleció su apuesta por otros segmentos tras haber madurado su plan de suscripciones en torno a la generación de noticias.

Queda la sensación, por más que desde el Washington Post se reporte que en las últimas siete semanas se ha tenido un crecimiento de suscriptores por primera vez desde el 2021, de que al WaPo aún le queda algo por hacer antes de estar listo para anunciar adquisiciones e incorporar nuevas audiencias.

Sea cual sea el resultado, el resto de los medios deben tomar nota.

El ciclo noticioso es tan variable y tan competido que más vale hacerse necesario a través de otras facetas.

Quien lo entienda estará más cerca de convertirse en hábito.

Quien no lo haga vivirá dependiendo de que el interés por un suceso informativo venga acompañado de que la gente elija ese medio en vez de cualquier otro que estará también volcado a lo mismo. ...