09 de Marzo de 2025
Estatal

Empleada de CFE denuncia acoso laboral orquestado por dirigente de la Sección 33 del SUTERM


Foto: Irineo Pérez Melo .

*Desde hace 4 años, Álvaro Ocaña Pimentel, al enterarse que es casada, dijo que ya no me sirve e inició acciones de hostigamiento y discriminación en su contra

Irineo Pérez Melo . | Xalapa | 08 Mar 2025

La empleada de la Comisión Federal de Electricidad (CFE), Maureen Santiago Hernández denunció ser víctima de acoso laboral, hostigamiento y discriminación, por parte de sus compañeros, pero que está orquestado por Álvaro Ocaña Pimentel, secretario general de la Sección 33 del Sindicato Único de Trabajadores Electricistas de la República Mexicana (SUTERM).

En entrevista, la trabajadora de la paraestatal dijo que este problema lo viene padeciendo desde hace cuatro años, en la cual sus compañeras Alma y Laura, quienes le endilgan sobrenombres y discriminando la diciéndole “indígena, naca o cucaracha”, todo ello propiciando por el dirigente sindical.

Dijo tener una antigüedad de 16 años en CFE División Oriente y agremiada al SUTERM, señalando de manera directa al dirigente sindical de ser su principal acosador y que se inició en el 2021, quien al enterarse “que soy casada, llegó al grado de decirme que con ese estatus no le sirvo”, agrego.

Señaló que el hostigamiento y discriminación la vive cotidianamente en su centro de trabajo por parte de compañeras quienes son solapadas por el propio Secretario General y denunció que la Comisión Seccional de honor y Justicia no ha detenido esta problemática, por el contrario le han levantado actas con la finalidad de rescindirle su contrato.

“Esta situación la vivo cotidianamente con actos de discriminación y hostigamiento laboral por parte de mis compañeras las cuales están solapadas por él, así mismo me han inventado situaciones que la Comisión Seccional de Honor y Justicia no ha detenido, es más ha intencionado para que la empresa me levante actas administrativas y ocurra una rescisión de mi contrato, así como que pueda perder los estatutos sindicales”.

Lamentó que, pese a las múltiples quejas interpuestas, a través de oficios y correos para frenar los abusos, éstas no fueron atendidas en lo local, por lo que la situación escaló a nivel nacional, dejándola en estado de indefensión, actuando con notorio favoritismo hacia el líder sindical.

“Ahora han elevado esta situación a nivel nacional, presentándome el día 4 de marzo en la Comisión Nacional de Honor y Justicia (del SUTERM), al llegar ahí anunciaron que ellos pasarían primero, dejándome a mí afuera, cuando yo solicité entrar con mi representante legal no me permitieron el acceso, dejándome en un estado de indefensión, o sea mi agresor está ahí adentro y él mismo antes de llegar dijo que ya estaba todo arreglado, que por eso iba a pasar primero”.

En ese lugar se levantó un acta sin su presencia, informándole únicamente que vía correo le enviarían una respuesta; visiblemente afectada por el acoso y hostigamiento, Maureen Santiago, reveló que empieza a tener problemas de salud, tanto física, como psicológica, por lo que responsabilizó al dirigente sindical de lo que me pudiera ocurrir.

“Ya es una situación que no tolero, ya está rebasando hasta el problema familiar, en el trabajo ya no puedo pararme ni siquiera al baño, porque al pararme las compañeras hacen comentarios, ha habido ocasiones en que me siguen al baño y se agachan para ver si realmente estoy haciendo pipí, me toman fotos, me graban, me tienen en aislamiento total; ya no puedo pararme a ver algún compañero, es más ni a mi jefe, porque llegan atrás y se ponen a ver qué estoy hablando, si le estoy diciendo algo. Ya es una situación que no la puedo soportar”.

Ante el problema laboral que padece, Maureen Santiago Hernández se armó de valor y decidió proceder por la vía legal, interponiendo una denuncia ante la Fiscalía General de la República y la Comisión Nacional de Derechos Humanos, al tiempo de hacer un llamado a las autoridades para que atiendan su caso, aunque advierte tener temor de posibles represalias.  

“Hago un llamado a las autoridades federales, a la fiscalía y a la Presidenta de la República para que por favor me apoyen en esta situación, sé que no soy la única trabajadora que está pasando por esto, pero sí sé que soy la única que ha hablado y tengo miedo a tener represalias, ya que constantemente buscan alguna situación para culparme”.

En el marco del 8 de marzo, Santiago Hernández, decidió romper el silencio porque en todos estos años confío en su representación sindical, sin embargo, nunca encontró ni respuesta ni respaldo, sino todo lo contrario. “En estas fechas del 8 de marzo me siento protegida para poder decir basta, basta de acoso, basta de hostigamiento por parte de esta persona y de todas las personas que colaboran con él”, afirmó por último.