Llegan a costas veracruzanas víctimas del derrame petrolero; sugiere Greenpeace no consumir productos marinos

*En conferencia de prensa, Roberto Iván Trejo Márquez, Coordinador Local de Greenpeace, el biólogo Johannes Warmut y Reynaldo Guerrero Corona, denunciaron y mostraron fotografías de un pez vela joven que fue arrojado a una playa de la zona centro-norte de Veracruz el pasado sábado al mediodía, y mencionaron que su deceso “muy probablemente devino como consecuencia de la contaminación de su hábitat por el hidrocarburo”

Walter Ramírez | Xalapa | 25 May 2010

Aunque el derrame de petróleo del Golfo de México no ha llegado aguas mexicanas, las primeras víctimas ya arribaron a costas veracruzanas. El pasado sábado 22 de mayo un pez vela de más de un metro y medio de largo y más de 70 kilógramos de peso, apareció en la zona conocida como Boquilla de Piedra, a la altura del Morro y el municipio de Palma Sola, denunciaron integrantes de Greenpeace.

Tras declarar que el daño ecológico más grave registrado en la historia similar al ocurrido hoy ha sido el derrame en las costas de Alaska hace 20 años, el biólogo alemán Johannes Warmuth, aseguró que el hundimiento de la plataforma petrolífera Deepwater Horizon de British Petroleum y su consiguiente dispersión del hidrocarburo el pasado 20 de abril, tendrá consecuencias peores e inimaginables a las registradas en el norte del continente americano.

En conferencia de prensa, Roberto Iván Trejo Márquez, Coordinador Local de Greenpeace, el biólogo Johannes Warmut y Reynaldo Guerrero Corona, denunciaron y mostraron fotografías de un pez vela joven que fue arrojado a una playa de la zona centro-norte de Veracruz el pasado sábado al mediodía, y mencionaron que su deceso “muy probablemente devino como consecuencia de la contaminación de su hábitat por el hidrocarburo”.

Informaron que el animal muerto está siendo estudiado para determinar los niveles de contaminación y las causas directas de su deceso.
“Lo más probable es que su hábitat haya sido invadido por el hidrocarburo y el pez buscó otra zona para continuar con vida, pero al salir de su ecosistema quedó vulnerable y ello pudo haber propiciado su muerte”, indicaron.

Asimismo, aseguraron que en un lapso no mayor a 90 días las aguas del litoral veracruzano y tamaulipeco estarán registrando la mancha de petróleo en sus playas. Y, por ello, recomendaron que la población deje de comer productos marinos desde ahora.

Johannes Warmut señaló que el ecocidio que se originará es incuantificable y urgió a los gobiernos de Estados Unidos, México, España, Portugal, Inglaterra y Cuba, “entre muchos otros que resultarán afectados” a iniciar una reunión inmediata para determinar acciones que aminoren en lo posible los daños a sus costas y a sus ecosistemas.

El biólogo alemán indicó que las violentas corrientes marinas circulares del Golfo de México están llevando la marea negra hacia el norte de Europa y que una vez que lleguen a esa zona, se devolverán directamente a las costas mexicanas y de ahí bajarán a diversos países del Caribe, principalmente la isla de Cuba, así como posiblemente a zonas costeras de Jamaica y Haití.

Advirtieron que el impacto ambiental que se ocasionará es inevitable ya que no hay forma de sellar el pozo donde se origina el derrame, el cual aún es incuantificable “ya que lo que se ve a simple vista es sólo la punta de un iceberg. Debajo de la superficie, la mancha se extiende y no es posible determinar su tamaño aunque se ha especulado que el grosor de la misma puede ser de hasta 100 metros por lo menos”.

Johannes Warmut mencionó que la velocidad con que se producirán los impactos ambientales es “indeterminada” ya que no hay información precisa de la cantidad de crudo derramado.