En Asia y Europa han surgido brotes por los movimientos antivacunas que rechazan la inmunización y argumentan que las vacunas son dañinas y artificiales, mencionan la doctora en Investigación Biomédica Básica y su alumna de doctorado, Zayda Yurley Fonseca Cobos.
El sarampión es grave porque puede causar encefalitis, ceguera, sordera e incluso la muerte en 1 de cada mil niños. Además de que es contagiosa en extremo: una persona infectada puede transmitirla a 10 o 15 más. Sin embargo, contamos con una vacuna eficaz desde hace más de 40 años, que, con el esquema completo (el cual incluye una dosis a los 12 meses y un refuerzo a los 18 meses), se logra una protección de por vida.
Puntos para estar alerta
A principios de este 2025, se emitió una alerta en México por casos importados de sarampión, lo que generó preocupación tras al aumento de brotes en Asia, África y Europa.
En 2016, el sarampión estaba prácticamente eliminado en América, según la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS). Sin embargo, con la pandemia se descuidó la vacunación, y México ha enfrentado brotes, destacó Zayda Yurley Fonseca Cobos.
El sarampión afecta sólo a los humanos, causando fiebre, tos, ojos rojos, manchas blancas en las mejillas y erupciones en la piel. Ingresa principalmente por las vías respiratorias o los ojos, se replica en el sistema inmunológico y afecta órganos como el timo, el bazo y los nódulos linfáticos. Los síntomas aparecen en pocos días y duran entre 4 y 7 días.
Susana López explica que la reducción en la cobertura de vacunación aumenta la población vulnerable, lo que facilita la transmisión si alguien infectado entra en contacto con personas no inmunizadas. Actualmente se promueve que los niños reciban las vacunas pendientes durante la pandemia, ya que es falso que las vacunas sean dañinas, y no vacunarse representa un riesgo mayor.
No vacunar a los hijos puede ser una decisión personal, pero irresponsable, especialmente cuando los niños infectados pueden contagiar a personas inmunodeficientes, adultos mayores o no vacunados, advirtió López Charretón; tan sólo en Europa, algunos ancianos enfermaron luego de exponerse a niños no vacunados.