“Fuga de mi padre, un acuerdo con gobierno”

*En entrevista con The Guardian, Rosa Isela Guzmán, reveló detalles de la vida del "Chapo"

Agencias . | Londres, Inglaterra | 04 Mar 2016

Rosa Isela Guzmán Ortiz, hija del conocido narcotraficante, Joaquín “El Chapo” Guzmán, reveló en una entrevista exclusiva con el diario británico “The Guardian” que su padre entró dos veces a Estados Unidos de forma clandestina para visitarla y que pactó con autoridades mexicanas de alto nivel cuando escapó del penal del “Altiplano”.

La mayor de los hijos del líder del cártel de Sinaloa, habló sobre su trabajo, dueña de una pequeña de lavado de autos, salones de belleza y cafés que van bien, asegura. Ella se presenta como una hija leal y una empresaria de éxito.

Residente de California, EU, país que adoptó como casa, Rosa Isela dijo que su padre no era un millonario como afirmaba la revista Forbes y aseguró que eso fue inventado por el gobierno mexicano.

En la entrevista, realizada en 2015 y que de acuerdo al rotativo duró tres horas, más las subsecuentes conversaciones por teléfono y Skype, la hija de uno de los narcotraficantes más famoso del mundo, aseguró que Joaquín Guzmán cruzó la frontera de México para visitarla.

“El vino dos veces”, confesó.

Al ser cuestionada, cómo uno de los fugitivos más buscados pudo ingresar a Estados Unidos, contestó: “Le pregunté lo mismo, créeme”.

El Chapo fue recapturado en Los Mochis, Sinaloa, el 8 de enero del año en curso, ahora peremacen preso en el penal del Altiplano, una cárcel de máxima seguridad al norte de la Ciudad de México.

Rosa Isela habló sobre la reestructuración del cartel y las traiciones, así como del presunto soborno de políticos de alto nivel, y el plan de “El Chapo” para retirarse. También habló de su amistad con la nueva generación de “narcojuniors”, integrado por las familias dentro del cártel que han crecido disfrutando de riqueza y privilegios.

A su vez, mostró fotografías privadas de la familia de su padre, además de cartas que éste envió desde la cárcel.

La hija de Joaquín Guzmán, lo describe como un hombre de familia que construyó un negocio exitoso con la aprobación del gobierno mexicano, sólo para ser traicionado por miembros del cartel rivales y políticos.

“Mi padre no es un criminal. El gobierno es culpable”.

Aunque no confirmó ni negó la participación de su padre en el contrabando de drogas (algo que “El Chapo” admitió a Sean Penn en la entrevista para la Rolling Stone), contó que vivía con humildad y se había retirado del negocio familiar en 2014, antes de ser capturado.

“Mi papá había pasado la antorcha a mi hermano Iván Archivaldo”.

Una de las revelaciones más fuertes que hizo Rosa Isela, es que mientras su padre tenía la intención de entregar las riendas del negocio a su medio hermano, el plan había consternado a su socio en el cártel: Ismael “El Mayo” Zambada. “Parece que al viejo no le gustaba mucho la idea”, indicó.

Contó que Guzmán Loera se encontraría con el veterano capo en un hotel de Mazatlán en febrero de 2014, sin embargo, en su lugar, fue emboscado por autoridades en ese lugar.

“Estamos completamente seguros de que ‘El Mayo’ lo entregó. Se reunían siempre en lugares privados y a mi padre le pareció extraño que sugiriera ese lugar”.

Antes del segundo escape del “Chapo”, el 11 de julio de 2015, esta vez del penal de máxima seguridad “El Altiplano”, Rosa Isela contó que en una visita que hizo a su padre dentro de esa cárcel, él se había comprometido a asistir a una reunión familiar programada en noviembre de ese año en Sinaloa.

Ante esto, que es interpretado como un golpe humillante para el gobierno mexicano, su hija asegura que funcionarios de alto rango habían aprobado el escape.

“La fuga de mi padre fue un acuerdo”.

En una conversación por Skype, realizada por The Guardian en enero y tras la recaptura de su padre, ella acusó “el gobierno rompió su promesa” y dijo que no respetaron el pacto.

“Ahora que lo atrapan dicen que es un criminal, un asesino. Pero no dicen cuando pidieron dinero para sus campañas. Son hipócritas”

Su hija lo consideró un cruel giro. “En este negocio no hay amistades, sólo asociados”, insistió.


LA PRIMOGÉNITA DEL ‘CHAPO’
Nacida en el municipio de Zapopan, Jalisco, en 1976, Rosa Isela es producto de la relación entre Joaquín Guzmán Loera y una maestra que conoció en la década de los setenta, llamada María Luisa Ortiz.

Luego de que finalizara la relación entre sus padres, la hija mayor del ‘Chapo’ fue criada por su madre y un padrastro, al que apuñaló a los diez años, por lo que fue internada en un centro para menores en Tijuana. Al salir, reanudó su relación con su padre.

El capo deseaba que su hija se casara con Vicente Zambada Niebla, también conocido como ‘El Vicentillo’, hijo de “El Mayo” Zambada con el que procreó dos hijos. Posteriormente, tras su separación inició una nueva relación con un sobrino de Juan José Esparragoza Moreno, “El Azul”, con quien tuvo otros dos niños.

En mayo de 1993 la profesión de su padre casi le cuesta la vida a ambos. Rosa Isela relató el incidente en que perdió la vida el cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo. Según recuerda, ella y Guzmán Loera estaban en un estacionamiento en el aeropuerto de Guadalajara, cuando un grupo de sicarios enviados por el cártel de Tijuana mató por error al católico y a otras 6 personas.

“En el día del asesinato yo estaba en un coche con mi padre cuando empezaron a disparar en todas las direcciones. No sabíamos quién era el que fue asesinado, pero más tarde me dijeron que era el cardenal. Mi padre no tuvo nada que ver con eso”.

Tras esto, el Chapo envió a su hija a vivir en california, semanas más tarde, fue capturado y pasó los siguientes años tras las rejas antes de su primer escape del penal de Puente Grande, Jalisco, en n, del penal de Puente Grande, Jalisco, el 19 de enero de 2001.

Ella por su parte, pasó los siguientes años tranquila en Estados Unidos, donde se convirtió en ciudadana, aprendió inglés y estudió ciencias de la computación en la Universidad de Phoenix, así como peluquería y cosmetología en las Escuela de Belleza Marinello en Riverside.

Para abrir sus negocios usó el dinero de su padre, lo que atrajo la atención de la Oficina Federal de Investigación por sospecha de lavado de dinero, lo que conllevó a una detención de 15 días y una fianza de 50 mil dólares.

Guzmán Ortiz dijo que después de la fuga, su padre visitó los EU a finales de 2015. El motivo, dijo, era visitarla a ella y a sus nietos, así como a sus hijas gemelas y su esposa Emma Coronel,que viven en Los Ángeles.